martes, 14 de octubre de 2008

Jardínes Lankester




Nos dió la bienvenida unas hermosas bromelias, y los rótulos que motivan a andar por los senderos de este hermoso jardín Lankester, que pertenece a la Universidad de Costa Rica. El primer contacto con el parque fue la señal del parqueo, muy sencilla pero tolerante con el entorno, la cultura y esa posibilidad de disfrutar sin tener que usar filtros, simplemente la meta era mirar, observar todo y contemplar para sentir. Sin embargo, para algunos y algunas que siguieron conversando, hablando por celular o escuchando Ipod, pasaron desapercibidos y el jardín hizo lo mismo con ellos.





Los rótulos son muy simples pero hermosos, de largo informan y de cerca dicen otras cosas o almenos ponen a volar la imaginación. Eso también es diseño.





Los rótulos son muy expresivos, además de comunicables.






Ahí en ese sitio, según se lee en el rótulo, se permiten parejillas. Qué divertido! No les parece?






Carolina sin entrar aún al tunel de bambú.




Diego, que es un buen observador descubrió una mantiz que amablemente nos modeló.

El parque japonés

El parque está en construcción y fuimos invitados a pasar aunque no esté terminado pero ya se siente y parece que fuimos transpòrtados al Japón. Los demás, quienes no aprendieron a ver simplemente pasaron de largo y no se percataron de nada.










Quizás hoy solo hay lodo, pero mañana será un espejo de agua donde se miren los helechos, y naden esos peces gigantes de color rojo naranja.




Todos felices al lado del amigo que nos mostró su proyecto con mucho orgullo.




Jorge, el ayudante del diseñador japonés nos auxilió amablemente para que todo el grupo saliera en la foto.







Dos masos hechos con bambú y un trozo de madera, son tran bellos como el jardín, son útiles a pesar de ser toscos y sencillos, como el arco, como el diseñador que los usa para empotrar las cañas de bambú en la tierra que torna rojiza como las aves del Paraíso.



La entrada al parque japonés será minismalista, un arco em bambú, límpio y simple pero cargado de cambiante belleza.








El amigo diseñador japonés mostraba sus creaciones, Diego los mira con atención pues descubrí que él, Diego, es un buscador que sabe ver y documentar lo encontrado.



Las construcciones están en proceso, a medio andar, como nosotros los visitantes andabamos a medio andar en ese momento. Pero era importante detenerse para mirar y documentar lo encontrado.



Me encantan las herramientas, como este pisón para compactar la tierra hecho de un tronco y dos palos.





Los tejidos de bambú y mecate son impresionantes.

El parque japonés parece que uno ingresa a un templo shintoista de arquitectura tradicional en bambú, está siendo creado por un diseñador cooperante japonés.




















Los mapas son una llamada de atención, están dispuestos en los senderos despúes del parque japonés y antes de llegar a la zona de cáctus. Se observa como hace unos cincuenta años el tamaño del bosque en Costa Rica era bastante y con los años se fue reduciendo, y el último, el que se observa en la foto siguiente adelanta al 2025, donde casi no habrá bosque y se presenta un enorme signo de interrogación.






Hay algunas fotos que se pueden repetir, pues unas las tomó Carolina y las otras yo, sin embargo son para compartirlas con quienes quieran mirarlas y caminar junto a nosotros en esta travesía por los senderos del jardín.






las fotografías fueron tomadas por Carolina Valencia y Luis Fernando Quirós (yo)durante una gira con los estudiantes de los cursos de diseño básico 2.







No se puede escatimar nada para ser observado, el cultivo del talento de mirar comienza con ver hasta que no podamos más. Ver la flor pero pensar en la estructura de su forma, en este caso de la conocida "flor de la carroña" está generada por la estrella de cinco picos inscrita en el pentágono.

















En el jardín Lankaster están construyendo una zona o parque japonés, con arquitectura tradicional en bambú, puentes de piedra y probablemente estanques donde habrá peces de esos enormes de colores rojo que se ven en las fotografías de los entornos tradicionales del Japón. Maroko nos invitó a dar un vistazo al proceso, para lo cual los y las estudiantes y nosotros aprovechamos para tomar algunas fotos.